¿Estás planeando una instalación eléctrica y no sabes si usar tubería IMC o EMT? Elegir mal puede costarte tiempo, dinero y seguridad. Aunque a simple vista parecen similares, cada una tiene aplicaciones específicas que pueden marcar la diferencia en el rendimiento y durabilidad del sistema eléctrico. Por eso, hoy te mostramos cuándo puedes usar tubería IMC y EMT.
La elección entre tubería IMC y EMT depende de varios factores relacionados con el tipo de instalación eléctrica, el ambiente, la resistencia mecánica requerida y las normas locales. Te mostramos una comparación clara y cómo decidir cuál usar.
Resistencia mecánica.
IMC: Más gruesa y resistente que EMT, aunque más liviana que RMC. Es apta para instalaciones donde se requiere mayor protección contra impactos físicos.
EMT: Más delgada y ligera, adecuada para lugares con bajo riesgo de daño mecánico.
OJO, usa IMC si necesitas mayor protección mecánica (como en zonas industriales o expuestas a impactos.
Ambiente de instalación.
IMC: Apta para interiores y exteriores. Y mejor resistencia a la corrosión ya que tiene recubrimiento galvanizado.
EMT: Preferible para interiores secos. Puede usarse en exteriores, pero requiere protección adicional contra la corrosión.
Costo.
IMC: Es un poco más costosa que la EMT.
EMT: Más económica y fácil de instalar.
Facilidad de instalación.
IMC: Más pesada y rígida, requiere herramientas más robustas.
EMT: Más fácil de cortar, doblar y manejar.
Elegir entre tubería IMC y EMT es una cuestión de seguridad y durabilidad, por ello, si buscas materiales de calidad y una asesoría profesional, siempre es mejor contar con Dielco, distribuidor de material eléctrico.
